Intrincadamente entrelazado

¿Recuerdas las mantas hermosas que las abuelitas solían hacer? El tipo de manta compuesta por diferentes patrones de telas cosidas juntas y que tomaban meses confeccionar. Cuando éramos niños nos maravillábamos de los detalles: las fibras intrincadamente entrelazadas que se juntaban para componer una manta.

Tu organización es como esa manta: intrincadamente entrelazada. Aunque no puedas reconocerlo en tu día a día, no deja de ser cierto. Tu departamento, tu equipo, tu rol específico, no solo afectan directamente a las personas a tu alrededor sino también a tus superiores y a las personas en otros departamentos inferiores. Tu influencia hace una diferencia al igual que la influencia de cada persona a tu alrededor.

Cuando una persona sirve efectivamente en su rol, todos se benefician. Cuando alguien no sirve efectivamente en su rol, el departamento completo y la organización se verán afectados en su totalidad. ¿Alguna vez has jalado un hilo suelto de una prenda de ropa sin saber que desharía la prenda aun más? Eso es exactamente lo que sucede cuando un aspecto de tu organización, o un miembro de tu equipo, no está funcionando apropiadamente en su rol. Eso afecta a la prenda o la manta completa. No funcionamos en silos, aunque la idea podría parecer atractiva.

Así que ésta es mi pregunta para ti: ¿Cómo estás contribuyendo a la organización intrincadamente entrelazada en la que sirves? ¿Eres una costura fuerte que une los diferentes departamentos y brinda estabilidad? ¿o eres una costura descociéndose bajo cualquier presión y por cualquier razón y como resultado debilitando la integridad de tu “manta” día a día? ¿Y qué de las personas a tu alrededor: cómo afectan a la organización en su totalidad?

Solo serás tan bueno como tu mínimo común denominador.